Persiste en RD inequidad social

Diagnóstico PNUD lo revela

SD. Un diagnóstico presentado ayer por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) colocó a la República Dominicana distante en sus metas de mejoría en los sectores de educación y salud, así como en lograr mayores niveles equidad en la población y reducir la pobreza.

El estudio -realizado a petición del ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Temístocles Montás- señala a rasgos generales el poco progreso en la mejoría de las condiciones de vida de los dominicanos, debilidad en la política social, un crecimiento económico que genera exclusión social.
Mientras que en las áreas de educación y salud destaca una calidad deficiente y el bajo financiamiento.

En la presentación de este informe, el coordinador de la Oficina de Desarrollo Humano del PNUD, Miguel Ceara-Hatton, explicó que este estudio también plantea las fortalezas del Estado dominicano en estos sectores y plantea propuestas para un plazo de 20 años con el propósito de mejorar estas áreas en un proceso de empoderamiento ciudadano.

La investigación, que abarcó dos años y se hizo con el fin de elevar el nivel de debate con relación a las políticas de desarrollo, tomó en cuenta los aspectos de política social, educación, salud empleo, seguridad social, asentamientos humano, justicia y derecho, la situación haitiana y la cohesión social.

"El acceso equitativo a las oportunidades debe depender del Estado de derecho y no de un poder discrecional, como es actualmente. Para ello, las políticas sociales deben orientarse a hacer efectivos los derechos, crear capacidades en las personas para que puedan ser lo que quieren, aspiran y valoran en la vida", destaca el documento.

Política Social
Sobre este tema, aunque se reconoce mejorías en las condiciones de vida, este progreso es menor que los promedios regionales y está por debajo del valor esperado por los estándares internacionales.

Explica que a pesar de centrar el eje del movimiento económico, social e institucional en el crecimiento económico, este genera una exclusión social que mantiene los déficits sociales tradicionales como la carencia de los servicios básicos.

En tanto, la consolidación de los derechos civiles y políticos aparece distorsionada con la permanencia del clientelismo y una justicia débil. Como soluciones en esta área se plantea asumir el derecho de las personas por encima del poder, rediseñar la política social para crear capacidades que satisfagan las actuales y racionalizar el gasto público.

También, fortalecer la cohesión social a través de un Estado solidario y tratar la presencia haitiana enfocando el respeto de los derechos humanos.

Educación y Salud
En estos sectores se diagnosticó de manera general una falta de equidad. En los enfoques específicos se destacó en el sector educación deficiencias en la cobertura y falta de espacios físicos adecuados, con un modelo dual segregado por el poder y la riqueza y que apunta a una baja calidad.

Señala que la educación de la República Dominicana ocupa los peores resultados de América Latina, Pruebas Nacionales sistemáticamente bajas, personal docente con más títulos, pero menos calidad.

Para enfrentar estos problemas, el PNUD propone la formación de docentes, la construcción de infraestructura y la implementación de un sistema de rendición de cuentas.

En el renglón salud se establece un bajo financiamiento público, débil capacidad rectora del Ministerio de Salud Pública, baja calidad de los servicios y altos precios de los medicamentos. Al respecto, propone ampliar la cobertura de servicios, completar los tres regímenes de la seguridad social y fortalecer la salud pública.

Empleo
En este sector, las conclusiones son que el crecimiento de la economía no se corresponde con el decrecimiento del empleo. Destaca, además, el debilitamiento del sindicalismo.

Ante la situación sugieren la formación de capital humano, mejorar el acceso al mercado laboral de mujeres, jóvenes y discapacitados e incrementar el apoyo a las micro y pequeñas empresas.
Montás en contra del "barrilito"

El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Temístocles Montás, dijo ayer que se opone a los recursos particulares o al "barrilito" que manejan los legisladores y a otras cosas que manejan al interior del Congreso, porque no le hacen bien a la democracia, pero favorece que se mantengan los programas de asistencia, como los del Gabinete Social, debido a que ayudan a reducir la pobreza.

Dijo que la intención es que los temas que contempla el estudio sean discutidos con los partidos políticos de oposición, principalmente con el PRD, a fin de contrarrestar la pobreza.

Diario Libre